"Los cocodrilos y sus parientes son reptiles de
cuatro patas, muy similares a los lagartos. Se distinguen por su usual
gran tamaño. En la espalda, desde el cuello hasta la cola, tienen
hileras de placas óseas, que pueden dar la impresión de espinas o
dientes. Quizás los conocemos mejor por su ferocidad, y en los casos de
las especies mayores, por ser peligrosos al máximo.
|
Estos reptiles se mantienen gran parte del
tiempo en el agua. Debido a su anatomía son capaces de abrir la boca y
tragar debajo del agua sin ahogarse. Por lo general los caimanes,
aligatores y gaviales son de agua dulce, mientras que los cocodrilos
habitan en agua dulce y salada. Los caimanes y aligatores son agresivos,
pero los cocodrilos podríamos decir que son súper agresivos. Mientras
que los gaviales son inofensivos.
Los cocodrilos pertenecen a un grupo muy antiguo, con más de doscientos
millones de años, con cientos de formas fósiles, que tuvieron
adaptaciones
en el transcurso de su historia. Los cocodrilos son animales muy
adecuados a los hábitats acuáticos y salobres de las áreas
tropicales.
En el agua los cocodrilos se impulsan con la cola, que además les
sirve como timón, y también con sus patas posteriores palmeadas;
en tierra se arrastran lentamente o caminan o corren elevando el
cuerpo sobre el terreno con sus cuatro extremidades, de cinco dedos
las anteriores y cuatro las posteriores.
Desde el nacimiento y hasta que alcanzan una talla aproximada de un metro
de longitud, consumen insectos, crustáceos, moluscos, anfibios y
peces pequeños. Por su parte, los juveniles y pre-adultos, prefieren
animales de mayor tamaño como son peces, pollos de aves, culebras,
basiliscos, ranas y pequeños mamíferos.
Cuando alcanzan la edad adulta, se alimentan
de distintas clases de animales sin importar el tamaño. Se estima
que un ejemplar consume, dependiendo de la edad del cinco al veinte por ciento de
su peso corporal de alimento por semana.
Para comer los cocodrilos aprisionan a su presa, que pueden tragar completa
si es del tamaño adecuado para este efecto. Si por el contrario
se trata de una presa grande, le dan vueltas hasta que la desgarran,
y luego engullen los trozos completos, ya que no tienen la habilidad
de masticar.
Estos reptiles tienen mala fama en cuanto a los ataques a humanos y realmente
existen algunos reportes accidentales en ese sentido, también pueden
llegar a atacar cerdos, becerros y hasta perros, sobre todo cuando
estos animales se acercan a beber en las márgenes de los ríos o
manglares"
estos animales son salvajes y muy peligrosos pero ellos necesitan nuestra ayuda ya que los usan para hacer accesorios y si no terminamos con esto estos animales no van a exitir y ellos solo atacan por defender su habitat.
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario